miércoles, 13 de agosto de 2008

Elección de Lección

Escena sideral

Estaban a un brazo de distancia
y les encantaba la proeza
de sentirse pegados,
de saberse ajenos, pero amantes.

En el aire volaban palabras
que sus bocas inquietas emitían
-hay besos que ninguna otra boca borra-,
le dijo, y los consumió la adicción.

Escena terrestre

Un libro. El pasado. Un mensaje:
"No te atrevas ni un poco
a dudar de mis ojos.
De su lenguaje.
Observa que mi boca está sedienta
y no es amor ni venganza.
Es la esperanza de morir,
otra vez, por esos besos
que debilitan mis huesos
y la pesada locura
de quererte un poquito.
Sabiendo que estoy lamiendo
las sobras de un plato podrido,
llenito de maldad.
Siniestro y soberbio.
Pero son tus besos
y por ellos pierdo dignidad..."

Escena última

Llega al precipicio.
Arranca los recuerdos
y los arroja al mar.
Busca consuelo en las estrellas
pero enseguida mira la tierra.
Salta sobre ella, se afirma,
nunca despega, y se va.

Aprendió la lección.