conversiones

Husmeandome, encontré unos recuerdos guardados. Recuerdos de un pasado vivido, un pasado grabado y archivado en total orden.
Pensamientos que van mutando. El contexto cambiante y yo, parte por parte, acompañando y siendo esclava de tal metamorfosis.
Un gran proyector y una proyección inconclusa. El archivo de mi vida y mi asegurada identidad, tales como se hayan dado las circunstancias y sus respectivas consecuencias.
Yo soy porque fui y aún sigo siendo.
No pude conservar nada. Todo cambia todo el tiempo y deshecho, y renuevo. Y de nuevo algo nuevo me posiciona.
Creo que es una evolución. No, afirmo que lo es. La evolución que mi Kapelusz me define como un "cambio gradual de lo que pasa de un estado a otro".
Los cambios se producen de forma continua. Y ya siento la necesidad de cambiar tantas cosas... empiezo por mí.

Lo que dura mi paz

A dos pasos de que la sombra me cubra. La música: orquesta sinfónica entre ramas y hojas.
Un pájaro muerto y otro hambriento. Mi percepción y yo.
Tantos bultos fuera de foco. Tantas cosas de más, como si importaran. Un perro aburrido paseando a una señora más aburrida todavía (me remito a las pruebas, hay tantas cosas de más).
El Grande ardiendo con furia y las nubes de gira, buscando una identidad.
La Lluvia nos dio tregua.
En mí estaba el deseo permanente de que ese Viento, Amo y Señor, nunca cesara.
Quien quisiera podría haber hecho con mi cuerpo, en ese momento, lo que le diera la gana... yo había abandonado mi ser físico. Aún incompleta, me sentía plena.
El Amo y Señor Viento tiene ese "qué sé yo" que me transporta. Bendito seas en todas tus formas.
Mis momentos más felices son fugaces.
Y cómo explicar que esa tarde fue un instante placentero y tan sólo estábamos El Espacio y yo, sin malditos tiempos.
Mi paz es fugaz.

Cuando duele

Se llena, se transmite y contagia.
Se busca, se encuentra y te encuentra desprevenido o incompleto, como la muerte pero muy distinto.
Cuando sangra duele, y tanto... como una guerra.
Una "acción" lo traspasa, lo acuchilla, lo desangra, lo debilita, lo asesina.
Y si de asesinatos se trata, tus palabras me elevan y me matan. Se entrevé, entre tus mañas, tu mensaje confuso, laberíntico, tan superfluo. Si nos dedicáramos a querernos... seríamos el todo. Te quiero, y me duele la tortura de hacerlo.
No lo quiero así, pero te necesito. Me creí fuerte y hoy me veo débil y como duele sentirse así.

Mi fuerza está en tus manos y estoy cayendo. No sería yo si caigo pero sin nosotros no soy. Cuantas verdades.

silhouette

De todas las formas estas expresado. Te moves, llevas el viento y la luz. No son precisamente los movimientos los que estimulan mis pulsiones, es el arte lo que me atrapa. El arte con que te mostras y me dejas verte como sólo yo puedo hacerlo.
El sonido quiere ser parte, y es silencio. Los ojos son el puente y las manos... las manos el río. El puerto en tu silueta y mi velero arribó.
De todos los ríos trancitados, es en el tuyo en donde descubrí que las olas son un vaivén placentero y no la rebelión.
La forma y el tacto. El contorno de tus días, la razón de mis noches largas e insatisfechas. Tu esencia y mi adicción. Tu magia y mi asombro. Tu mirar y mi perdición.
Ante el todo, el borde y el espacio, construir un momento que nos llene de lo que nos falta. De tu medio vaso lleno y de mi medio vaso vacío.